Ya ha hecho las maletas y se dirige al aeropuerto para tomar el vuelo que le llevará a ese magnífico destino que es Córcega.

Una vez que haya aterrizado en el aeropuerto de Figari y pasado el control de aduanas, recogerá su coche de alquiler. Desde Marsella, le recomendamos el vuelo de las 09:15 vía Air Corsica, con llegada a las 10:25. Su coche de alquiler será un Citroën C3 de categoría B o similar.

Partirá en dirección a su alojamiento, el rancho Campo Palombaggia, a 11 km de la ciudad de Porto Vecchio. Esta región es un espejo de Córcega, entre montaña y playa, urbano y rural, aldeas y monte bajo.

El alojamiento es un Rancho, construido con piedra de la zona, situado en pleno Maquis, en un entorno virgen donde reinan la tranquilidad y la intimidad. Es un lugar virgen con el típico encanto corso. Llegará a su propia burbuja del paraíso. El rancho se ha reconvertido respetando el carácter rústico de los antiguos apriscos.

Este es un día para descubrir la región sur de Córcega. La jornada incluye una excursión de 2 horas a caballo. Un guía le ayudará a dar sus primeros pasos a caballo y le mostrará los maquis y las playas de Córcega. (Palombaggia y la playa de Carataggio, apodada playa de Tahití).

Dependiendo de su nivel de equitación, puede incluso considerar la posibilidad de galopar por la playa de arena blanca de Palombaggia a partir de las 7.15 de la mañana. Se sentirá como si estuviera solo en el mundo en esta inmensa playa (1,5 km). Traiga el bañador bajo el pantalón y calzado cerrado. Podrás bañar a tu caballo o sumergir las piernas en el agua.

Con un coche a su disposición, ponga rumbo a Bonifacio por la tarde, donde podrá pasear por las calles del casco antiguo. O simplemente relajarse junto a la piscina o en la playa.

Al final del día, salga a descubrir el golfo de Porto Vecchio y disfrute de una comida en una de las terrazas del puerto.

Después del desayuno, la salida es a partir de las 10 de la mañana. Así que es una buena idea dormir hasta tarde. Le espera un hermoso día, así que aproveche las últimas horas para conducir por el interior o por las carreteras costeras, parando en cada cala.

Los vuelos suelen ser a última hora de la tarde. Deje tiempo suficiente para devolver el coche a la empresa de alquiler en el aeropuerto.